lunes, 19 de mayo de 2014

Once de Abril.


Despierto con una corazonada o más bien, con una estaca en el alma.
Era un día hermoso y radiante como pocos, era un momento perfecto para perderte…
Tú amor mermó rápido, sin darme cuenta ya no eras parte de esos paisajes hermosos que mis ojos ya cansados tanto amaban.
Las horas pasaban y ya sabía lo que con tanta prisa querías gritarme, triste avanzo hacia tus brazos ya cerrados al igual que ese corazón que se agitaba junto al mío cuando nos sentíamos libres y nos sentíamos uno…
La noche cae y la brisa fresca golpea mi rostro desdibujado, la mirada perdida era parte de aquel desahucio de amor que jamás olvidaré…
¿Cómo olvidar el día en el que me sentí tan vivo?
Aún celebro nuestro aniversario, ese día en el que volví a ser uno solo.

El día que esto termine ya te habré dejado ir…  

jueves, 8 de mayo de 2014

Tentáculos.

         Te mantienes a distancia y aún así te siento, entre más lejos más te deseo, imposible sueño que me ahoga.
         Estando al otro lado de la habitación te miro fijamente a los ojos, deseo gritarte lo que tanto quiero, renunciar a mi miedo estúpido de ser pisoteado por tu soberbia, por tu clase y por tu belleza.
         Algo no deja que mis palabras fluyan, algo me asfixia y me hace caer débil en el barro cargado de vergüenza e impotencia, son tus tentáculos que me atrapan… Me mantienes muy lejos pero siento dentro de mí esa incontenible ira tuya, esa fuerza que me cautiva y aterra.
         No retires jamás esa extensión de tu alma de este corazón.

Tengo miedo y huelo tu desprecio pero aun así te siento… no será tu mejor versión pero aun así te tengo…